Después de una fuerte caída de -30,4% del consumo aparente de acero en Chile durante 2022, entre enero y septiembre de 2023 se registra una baja de -0,3%, totalizando 1.821.000 en comparación a las 1.826.000 toneladas registradas en los 3 primeros trimestres de 2022.

En este caso, señaló Juan Carlos Gutiérrez, director ejecutivo del ICHA, “la curva de tendencia de consumo aparente de acero cambia la pendiente de caída desde enero de 2022 y comienza a estabilizarse desde junio de 2023 con leves alzas”.

“La actividad en los sectores de construcción, minería e industria son las que gatillan en mayor medida el consumo de acero en Chile, y en consecuencia las señales de reactivación de inversiones generan las condiciones para detener y contener la caída”, señaló Gutiérrez.

Por familias de productos los aceros largos que incluyen perfiles y barras registran una caída del 10,6% durante los primeros nueve meses del año en comparación a igual período de 2022, llegando a un total de 770.000 toneladas.

En cuanto a la familia de los aceros planos, estos registraron un aumento del 9,3% en los períodos comparados, llegando a 1.022.000 toneladas. En esta familia, destaca el aumento del 29,8% que ha tenido el consumo aparente de planchas gruesas las que totalizan 207.000 toneladas de consumo aparente.

Proyecciones 2023 y 2024

 A pesar de las caídas registradas en los primeros nueve meses del año, Juan Carlos Gutiérrez señaló que para 2023 se espera que el consumo aparente de acero llegue a 2.379.000 toneladas, lo que representaría un crecimiento del 3,9% en comparación a 2022. “Si bien este aumento no es dinámico, la buena noticia es que no se ve una caída continua para el presente año”, señaló el ejecutivo.

Aún así, según las proyecciones del ICHA, en 2024 se volvería a registrar un descenso del 0,6% en el consumo aparente de acero, en relación con 2023.

Importación y exportación de productos estratégicos de acero.

En esta oportunidad, el ICHA dio a conocer un nuevo informe relacionado con la importación y exportación de productos estratégicos de acero. Estos corresponden a productos terminados de acero con potencial de sustitución a la producción en la industria metalúrgica y metalmecánica nacional.

Los detalles de este informe están a disposición para los socios del ICHA a través de info@icha.cl

Así lo señala el último “Informe de Acero”, generado por el Instituto Chileno del Acero, ICHA, que detalla que el consumo aparente de acero en Chile cayó en un 8,1% durante el primer semestre de este año, totalizando 1 millón 182 mil toneladas, el resultado más bajo del último quinquenio.

Juan Carlos Gutiérrez, director ejecutivo del ICHA, señaló que “En 2023 persiste una recesión. Hay una disminución en la actividad minera, inmobiliaria e industrial, situación económica recesiva que se manifiesta con relevancia en sector construcción.  Estas contracciones son las que gatillan el menor consumo de acero”.

En relación con las importaciones de acero, Gutiérrez indicó que “Se terminó la tendencia de aumento de participación de las importaciones que se venía observando desde el año 2021. El primer semestre de 2023 la participación de importación pasó de un 72% en 2022 a un 67% para lo que va del presente año”.

Resultados por familias de productos

El informe señala que el volumen de aceros largos alcanzado en el primer semestre de 2023 fue de 506 mil toneladas, 106 mil toneladas menos que en igual período de 2022, representando una caída del 17,3%.

En los aceros planos, el consumo aparente durante el primer semestre de 2023 obtuvo un volumen de 654 mil toneladas, lo que equivale a una leve variación negativa de 0,7% respecto de igual período del año anterior.

Durante el primer semestre de 2023, el consumo aparente de las planchas gruesas aumentó un 21,1% en comparación al mismo período del año 2022, alcanzando un volumen de 129 mil toneladas.

Proyección del consumo aparente de acero en Chile

Juan Carlos Gutiérrez señaló que “la proyección del consumo aparente de acero para 2023 muestra en el rango esperado, una caída del 0,8% alcanzando un consumo de 2 millones 269 mil toneladas, mientras que para 2024 la estimación preliminar es que el consumo aparente llegue a 2 millones 258 mil toneladas, concordante con la caída de un 0,5% en la inversión en construcción proyectada por la Cámara Chilena de la Construcción”.

Gutiérrez agregó que “la caída de consumo aparente de acero en Chile equivalente a -30,4% para el año 2022 respecto del año anterior, se posiciona como la segunda mayor contracción de los últimos 27 años, provocada por la actual recesión económica que enfrenta el país, solo detrás de la recesión del año 2009

El Instituto Chileno del Acero, ICHA, dio a conocer la última edición de su reporte trimestral sobre consumo aparente de acero en Chile. El informe indica que durante el primer trimestre del año el consumo aparente fue de 603 mil toneladas, lo que sitúa a este período como el peor del quinquenio 2019-2023, con una caída equivalente a un -12,7% de caída respecto del mismo período del año anterior.

Cabe destacar que el consumo aparente de acero laminado es el resultante de la producción local, más las importaciones y descontando las exportaciones del país, en un período de tiempo.

Consumo aparente de aceros largo

Específicamente en este punto, durante el primer trimestre de 2023, el consumo aparente de los productos largos alcanzó un volumen de 234 mil toneladas, la cifra más baja observada en el período 2019 – 2023, reflejando una caída de un -29,5% respecto de igual período del año anterior.

El consumo aparente de barras en el primer trimestre correspondió a un volumen de 209 mil toneladas, nuevamente el más bajo del quinquenio y reflejando una caída de un -30,8% respecto del primer trimestre del año anterior.

Al igual que la caída del consumo aparente de barras durante el primer trimestre de 2023, los perfiles también obtuvieron una variación negativa, en este caso fue de un -16,8% respecto de igual período del año anterior, alcanzando un volumen de 26 mil toneladas, el más bajo del período 2019-2023.

Aceros Planos

En los aceros planos, el consumo aparente durante el primer trimestre de 2023 obtuvo un volumen de 358 mil toneladas, lo que equivale a una leve variación positiva de +2,6% respecto de igual período del año anterior.

Durante el primer trimestre de 2023, el consumo aparente de las planchas gruesas aumentó un +1,5% en comparación al mismo período del año 2022, alcanzando a 64 mil toneladas.

Los aceros planos laminados en caliente tuvieron un notable crecimiento de un +145% de consumo aparente durante el primer trimestre de 2023 en comparación a igual período de 2022, equivalente a 117 mil toneladas más de consumo, alcanzando las 198 mil toneladas, el más alto dentro del quinquenio.

En el primer trimestre de 2023, los productos planos laminados en frío alcanzaron un consumo aparente de 21 mil toneladas, cayendo un -38,3% respecto del año anterior en igual período.

En igual período los aceros planos revestidos lograron un consumo aparente de 72 mil toneladas, reflejando una caída de -56% en comparación con el primer trimestre del año anterior.

Los tubos sin costura han mantenido su tendencia positiva de consumo promedio desde mayo de 2020 hasta el primer trimestre de 2023, pero desde mayo de 2022 se muestra en la gráfica un consumo positivo más fortalecido alcanzando una tasa promedio de +0,09%.

Proyección Consumo Aparente de Acero

El Instituto Chileno del Acero proyecta que el consumo aparente de acero para 2023 se mantiene en el rango esperado y debería situarse en torno a un crecimiento del 1,2% alcanzando un consumo de 2.316.000 toneladas.

Según informó el Instituto Chileno del Acero, ICHA, durante el primer semestre del año el consumo aparente de acero llegó a 1 millón 305 mil toneladas, lo que represente una caída del 21,2% en relación con igual período de 2021 y ubicándose en niveles muy similares a los del primer semestre de 2020.

Cabe destacar que el consumo aparente de acero es un indicador de reconocimiento internacional utilizado para identificar la demanda de acero, en el que se calcula la cantidad total de productos de acero laminado que resultan de la producción local, más las importaciones y descontando las exportaciones del país en un período determinado.

Según el último informe entregado por el ICHA, el consumo aparente de los aceros planos durante el primer semestre de 2022 alcanzó un volumen de 658 mil toneladas, lo que equivale a una caída del 26,3% respecto de igual período del año anterior.

En tanto, los aceros largos, que incluyen barras rectas y en rollos, perfiles livianos y pesados laminados en caliente y alambrón, registraron una variación negativa del 15,9% respecto del primer semestre de 2021. Totalizando un consumo aparente de 630 mil toneladas, situándose en el registro más bajo del período 2018 a 2022.

La mayor caída se registró en la planchas gruesas, que muestran una disminución del 70,2% durante el primer semestre del año en comparación con igual período de 2021. Esto significó una disminución en 250 mil toneladas respecto del primer semestre del año pasado.

El único grupo que registró crecimiento fue el de los aceros planos laminados en caliente, los que tuvieron una aumento del 56,4% durante el primer semestre de 2022 en comparación a igual período de 2021, alcanzando un consumo aparente de 189 mil toneladas, el segundo más alto dentro del período 2018-2022.

El ICHA proyectó que para este año el consumo aparente de acero podría caer en un 22,9% en relación con 2021, totalizando 2 millones 535 mil toneladas. 

El Instituto Chileno del Acero, ICHA, dio a conocer su último “Informe de Acero” donde entrega las cifras del consumo aparente durante el primer trimestre de 2022 y una comparación del quinquenio 2018-2022.

Juan Carlos Gutiérrez, director ejecutivo del ICHA, informó que entre enero y marzo de este año el consumo aparente de acero en Chile, es decir la cantidad total de productos de acero laminado que resultan de la producción local, más las importaciones y descontando las exportaciones del país, en un período de tiempo, fue de 681 mil toneladas, que es casi equivalente al volumen del año 2020 en el mismo período (697 mil toneladas), pero con contexto económico, político y sanitario muy distintos. Esto significa, representa, señaló el ejecutivo una disminución del 16,1%. Con respecto a igual período de 2021.

En relación con los aceros largos, el informe arroja que durante el primer trimestre de 2022 el consumo aparente alcanzó un volumen de 322 mil toneladas, es decir la menor cifra del quinquenio 2018-2022, mostrando una baja del 16,9% respecto del año primes trimestre de 2021.

Específicamente las barras de acero totalizaron un volumen de 292 mil toneladas, esto se traduce en una variación negativa de un 17,6% respecto del T1 del año anterior. Así, señaló Juan Carlos Gutiérrez, se reafirma el cambio de tendencia positiva en la tasa observado hasta noviembre del año 2021, a partir de dicho mes hasta marzo 2022, la tasa de consumo promedio es de -0,05%.

Siguiendo la misma tendencia, durante el primer trimestre de 2021 los perfiles también obtuvieron una variación negativa, en este caso de un -8,7% respecto de igual período del año anterior, alcanzando un volumen de 30 mil toneladas de consumo aparente.

En esta familia de productos, después de 20 meses de tasa promedio de consumo positiva iniciada en marzo de 2020, ocurre un punto de inflexión en noviembre de 2021, cambiando a una tasa promedio negativa de -0,02% hasta marzo 2022.

En los aceros planos, el consumo aparente durante el primer trimestre de 2022 alcanzó un volumen de 349 mil toneladas, lo que equivale a una caída del 16% respecto de igual período del año anterior.

Durante el primer trimestre de 2022, el consumo aparente de las planchas gruesas disminuyó un 50,8% en 2022 en comparación al mismo período del año 2021, alcanzando a 63 mil toneladas, lo que se traduce en 65 mil toneladas menos de consumo aparente en igual período.

Los aceros planos laminados en calientes tuvieron una crecimiento de un 8,2% del consumo aparente durante el primer trimestre de 2022 en comparación a igual período de 2021, alcanzando un total de 81 mil toneladas, el segundo más alto dentro del quinquenio.

En el T1 de 2022, los productos planos laminados en frío alcanzaron un consumo aparente de 34 mil toneladas, creciendo un 5,7% respecto del año anterior en igual período.

En 2022 durante el primer trimestre, los aceros planos revestidos alcanzaron un consumo aparente de 163 mil toneladas, reflejando una caída de 7,3% al comparar con el T1 del año anterior.

Desde noviembre de 2020 se venía observando una tendencia creciente y sostenida en la tasa promedio de consumo de aceros planos revestidos, que ha sido revertida a una tasa promedio de -0,09% a partir de enero 2022.

En los aceros planos laminados en caliente, la tasa positiva de consumo promedio observada desde mayo 2021 se ha visto atenuada a una tasa promedio de +0,01% a partir de diciembre de 2021.

Respecto de las proyecciones del consumo aparente de acero en Chile, el ICHA informó que para este año se espera que llegue a los 2 millones 578 mil toneladas, considerando un mínimo de 2 millones 285 mil y un máximo de 2 millones 871 mil toneladas. Como referencia, en 2021, el consumo de acero en Chile fue de 3 millones 287 mil toneladas.

El ICHA entrega elabora este Informe de Acero, recurriendo a fuentes oficiales como la World Steel Association, ALACERO, el Servicio Nacional de Aduanas y el Banco Central de Chile y la entrega en forma exclusiva a sus socios para que cuenten con un panorama acertado del mercado y facilitar su toma de decisiones, pero sin entregar proyecciones ni análisis de precios del acero.

El Instituto Chileno del Acero, ICHA, informó que el consumo aparente de acero en Chile durante 2021 llegó a 3 millones 287 mil toneladas, lo que significa un aumento del 38,8% con respecto a 2020 y es el mayor registro del quinquenio 2017-2021.

Juan Carlos Gutiérrez, director ejecutivo del Instituto Chileno del Acero, ICHA, explicó que el por consumo aparente se entiende la cantidad total de acero producido en el país más las importaciones y descontadas las exportaciones. Agregó que la cifra registrada en 2021 “permitió retomar la tendencia positiva de los tres primeros años del quinquenio”.

“Este crecimiento se debe en parte a los niveles de inversión en construcción registrados en 2021, que superaron las 687 millones de UF, equivalente a un 12,8% mayor al registrado en 2020 e igualando la inversión en construcción de 2019, según el último informe publicado por la Cámara Chilena de la Construcción”, señaló Gutiérrez.

A lo anterior, dijo el ejecutivo, se suman los procesos de reposición de los niveles de inventarios de productos terminados, luego de verse afectada la producción internacional y las importaciones de acero debido a la pandemia en el periodo anterior.

El consumo aparente de aceros largos, que incluyen barras y perfiles, utilizados principalmente en las industrias de la construcción y metalmecánica, creció en un 23,3% respecto de 2020 alcanzando a un millón 518 mil toneladas, lo que la posiciona como la mejor cifra de los últimos 5 años.

Otra de las principales familias de productos de acero que se consumen en Chile corresponde a los aceros planos, principalmente a planchas y aceros especiales. Según el informe entregado por el ICHA, el consumo aparente de éstos creció en 2021 en un 56,3%, lo que significó un consumo aparente de un millón 743 mil toneladas. Ambos indicadores se posicionaron como los mejores del quinquenio reportado.

En términos per cápita, el consumo aparente de acero en 2021 llegó a 169 kg, lo que sitúa a Chile entre los mayores consumidores de acero por habitante en Latinoamérica.

Para este año, el ICHA proyecta que el crecimiento en el consumo aparente de acero en el país se mantendrá dentro del rango esperado y podría anotar un crecimiento del 4,8%, totalizando 3.128.000 toneladas.

El Instituto Chileno del Acero, ICHA, es el principal referente técnico en Chile dedicado a impulsar el uso del acero en sus diversos formatos y aplicaciones, generando estudios, capacitaciones y publicaciones técnicas destinadas a resolver las necesidades de los distintos sectores económicos que utilizan el material, impulsando la industrialización, el desarrollo sostenible y la economía circular, a través de la colaboración pública privada.

Así mismo, explicó Juan Carlos Gutiérrez, una de las principales labores del ICHA es la de preocuparse de mantener actualizada la normativa aplicada el Chile para los distintos productos de acero y así garantizar su calidad y correcto uso.

El mercado siderúrgico de América Latina y el Caribe durante enero-junio de 2018 muestra que el consumo de acero laminado fue similar al del primer semestre de 2017, mientras que la producción regional de acero crudo y de acero laminado creció 3% y 5%, respectivamente en comparación a los mismos meses de 2017.

Así lo consiga el último informe de Alacero, agregando que la región disminuyó 10% sus importaciones, no obstante, el consumo regional fue abastecido en un 35% por dichas importaciones. Las exportaciones superan en 3% a las del primer semestre 2017. Por su parte, la balanza comercial se mantiene negativa, aunque disminuyendo 18% su déficit.

Producción

Acero crudo.  América Latina tuvo una producción de 32,6 millones de toneladas (Mt) de acero crudo en enero-junio 2018, 3% superior a lo registrado en el mismo período de 2017 (31,6 Mt). Brasil es el principal productor con 53% del total regional (17,2 Mt), aumentando 3% versus enero-junio 2017.

Acero laminado.  La región produjo 27,4 Mt de acero laminado, 5% más que en enero-junio de 2017. Los principales productores son Brasil 11,6 Mt (42% del total latinoamericano) y México con 9,9 Mt, con 36%.

Consumo de acero laminado

En el primer semestre del año, la región registró un consumo de acero laminado de 33,5 Mt, similar a enero-junio 2017 (33,6 Mt). Los principales países que incrementaron su consumo, tanto en términos absolutos como porcentuales fueron, Brasil (847 mil toneladas y creciendo 9%), Argentina (353 mil toneladas  y 15%), Uruguay (103 mil toneladas y 4%).

Por otro lado, en el mismo período Venezuela, Perú y Honduras registraron caídas de 63%, 21%, y 7% respectivamente.

Del total latinoamericano, 57% corresponde a productos planos (19,3 Mt), 42% a productos largos (14,0 Mt) y 1% a tubos sin costura (461 mil t).

Balanza comercial

Importaciones: En el primer semestre de 2018, América Latina importó 11,7 Mt de acero laminado, 10% menos que lo importado en mismo período de 2017 (13,0 Mt). De este total, 71% corresponden a productos planos (8,3 Mt), 27% a productos largos (3,2 Mt) y 3% a tubos sin costura (298 mil t).

Actualmente, las importaciones de laminados representan 35% del consumo de la región, lo que trae aparejados desincentivos para la industria local, fricciones comerciales y pone en riesgo fuentes de empleo.

Exportaciones: Las exportaciones latinoamericanas de acero laminado fueron 5,2 Mt, 3% más que lo registrado en enero-junio 2017 (5,0 Mt). De este total, 44% corresponden a productos planos (2,3 Mt), 43% a productos largos (2,2 Mt) y 13% a tubos sin costura (667 mil t).

Balanza deficitaria: En enero-junio 2018, la región registró un déficit comercial en volumen de 6,6 Mt de acero laminado. Este desbalance es 18% menor al observado en enero-junio 2017 (-8,0 Mt).

Brasil es el único país que mantiene un superávit en su comercio de acero laminado (1,3 Mt). Contrariamente, el mayor déficit se registró en México (-3,0 Mt). Lo siguieron Colombia (-1,2 Mt), Chile (-822 mil t), Perú (-685 mil t), y Ecuador (-575 mil t).

La evolución de los flujos de comercio y el saldo se presentan en el Gráfico 02.

Información adelantada: Producción julio 2018

Información adelantada de julio 2018, indica que la producción de acero crudo alcanzó 5,6 Mt en el mes, 4% mayor que junio 2018 y 5% mayor que en julio 2017.

La producción de laminados cerró en 4,5 Mt, 3% mayor que en junio 2018 y 1% más que en julio 2017. De forma acumulada, entre enero-julio 2018, la producción de laminado alcanzó los 32,0 Mt, 5% más que en enero-julio 2017 (30,6 Mt).

Fuente: Alacero

El mercado siderúrgico de América Latina y el Caribe muestra que durante enero-mayo de 2018  el consumo de acero laminado se mantuvo similar al mismo período de 2017, mientras que la producción regional de acero crudo y de acero laminado creció 3% y 6%, respectivamente versus el mismo período del año anterior.

Así lo consiga el último informe de Alacero, agregando que si bien la región ha disminuido 8% sus importaciones, el consumo regional es abastecido en un 34% por dichas importaciones. Las exportaciones superan en 8% a las de enero-mayo de 2017. Por su parte, la balanza comercial se mantiene negativa, aunque disminuye 18% el déficit.

Producción

 Acero crudo: América Latina tuvo una producción de 27,1 millones de toneladas (Mt) de acero crudo en enero-mayo 2018, 3% superior a lo registrado en el mismo período de 2017 (26,4 Mt). Brasil es el principal productor con 53% del total regional (14,3 Mt), aumentando 1% versus enero-mayo 2017.

Acero laminado: La región produjo 24,0 Mt de acero laminado, 6% más que en enero-mayo de 2017. Los principales productores son Brasil 9,8 Mt (41% del total latinoamericano) y México con 8,3 Mt, con 35%.

Consumo de acero laminado

 En los cinco primeros meses del año, la región registró un consumo de acero laminado de 28,7 Mt, similar a enero-mayo 2017 (28,7 Mt). Los principales países que incrementaron su consumo, tanto en términos absolutos como porcentuales fueron, Brasil (531 mil toneladas adicionales y creciendo 7%), Argentina (369 mil toneladas adicionales y 19%) and Ecuador (68 mil toneladas y 9%).

Contrariamente, en el mismo período Perú, Bolivia y México registraron caídas de 21%, 13%, y 5% respectivamente.

Del total latinoamericano, 57% corresponde a productos planos (16,3 Mt), 41% a productos largos (11,7 Mt) y 2% a tubos sin costura (584 mil toneladas).

Fuente: Alacero

El mercado siderúrgico de América Latina y el Caribe durante enero-abril de 2018 presentó un incremento de 3% en el consumo de acero laminado, mientras que la producción regional de acero crudo y de acero laminado creció 5% y 7%, respectivamente versus el mismo período del año anterior, confirmando las mejores condiciones económicas mundiales y regionales.

Así lo consiga el último informe de Alacero, agregando que si bien la región ha disminuido 18% sus importaciones, el consumo regional es abastecido en un 31% por dichas importaciones. Las exportaciones superan en 12% a las de ene-abr de 2017. Por su parte, la balanza comercial se mantiene negativa, aunque su déficit disminuye 34%.

Producción

Acero crudo.  América Latina tuvo una producción de 22,0 millones de toneladas (Mt) de acero crudo en ene-abr 2018, 5% superior a lo registrado en el mismo período de 2017 (20,9 Mt). Brasil es el principal productor con 52% del total regional (11,6 Mt), aumentando 4% versus ene-abr 2017.

Acero laminado.  La región produjo 18,5 Mt de acero laminado, 7% más que en ene-abr de 2017. Los principales productores son Brasil 7,8 Mt (42% del total latinoamericano) y México con 6,6 Mt, con 36%.

Consumo de acero laminado

En los cuatro primeros meses del año, la región registró un consumo de acero laminado de 22,4 Mt, 3% mayor que en ene-abr 2017 (21,8 Mt). Los principales países que incrementaron su consumo, tanto en términos absolutos como porcentuales fueron, Brasil (782 mil toneladas adicionales y creciendo 13%), Argentina (395 mil toneladas adicionales y 27%) y Panamá (53 mil toneladas y 51%).

Contrariamente, en el mismo período Uruguay, Perú y Bolivia registraron caídas de 33%, 21%, y 18% respectivamente.

Del total latinoamericano, 57% corresponde a productos planos (12,9 Mt), 41% a productos largos (9,3 Mt) y 2% a tubos sin costura (315 mil toneladas).

Fuente: Alacero

El acero es uno de los materiales más utilizados en la construcción. En Chile, se usa en diversos formatos que van desde el fierro en construcción, usado para elaborar el hormigón armado y que corresponde a casi la mitad del consumo del acero en el país y más del 80% de la construcción de edificios, hasta el acero estructural que se usa sobre todo en infraestructura industrial.

El director ejecutivo del Instituto Chileno del Acero, Juan Carlos Gutiérrez, explica que “en Chile se usa mayoritariamente el hormigón armado en la construcción de edificios, a diferencia de los países más desarrollados donde también se utiliza de forma significativa el acero estructural, que en determinadas ocasiones tiene múltiples ventajas por sobre el hormigón”.

El profesor Alejandro Torres, de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Central, destaca algunas ventajas de utilizar el acero estructural en la construcción: “Es un material que tiene una relación peso/ resistencia muy conveniente, lo cual permite ahorrar en costos de transporte. Además, es un material dúctil para trabajar, pudiendo adoptar muchas formas diferentes y adaptarse a muchas formas arquitectónicas. Dada su resistencia estructural en relación con su peso y sección transversal, puede abarcar grandes luces, por lo cual es muy utilizado para la construcción de plantas libres”.

Fuente: La Tercera

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