La semana pasada se conoció el caso del escándalo protagonizado por la compañía japonesa Kobe Steel, uno de los mayores fabricantes de acero del mundo, que admitió que había falsificado los datos sobre la calidad de sus productos, afectando a más de 500 clientes, entre ellos las grandes fabricantes de automóviles.

Los alcances de esta noticia y sus efectos en Chile son analizados en la edición de hoy del Diario Financiero por el director ejecutivo de ICHA, Juan Carlos Gutiérrez, quien detalla las acciones que se están impulsando en el mercado local para normar la calidad de los productos de acero que se comercializan.

A continuación el texto completo del artículo:

La ruta en Chile del acero de Kobe, la gigante japonesa
en medio del escándalo por certificados de calidad falsos

A raíz del caso, las autoridades en Chile destacan la necesidad de profundizar los controles. Actualmente trabajan en un sistema de rotulado para el acero similar al utilizado en alimentos.

Kobe Steel, la tercera mayor siderúrgica de Japón y un gigante global, reconoció a comienzos de mes que venía adulterando los certificados de calidad de sus productos desde hace una década, lo que activó una ola de investigaciones en todo el mundo. Aunque la atención se ha enfocado principalmente en los riesgos para la seguridad en las industrias aeroespacial y automotriz, sus principales clientes, las amenazas se extienden a numerosos sectores y países, incluyendo Chile. A nivel local, la atención recae especialmente en el acero utilizado para la construcción y la minería. Desde que se conoció la información, el Instituto Chileno del Acero (ICHA), ha redoblado los esfuerzos para determinar los alcances.

El director ejecutivo de la entidad, Juan Carlos Gutiérrez, se reunió con representantes de Aduanas para analizar el caso y realizar un cruce de datos.

A partir de antecedentes recogidos a través de la plataforma de información de comercio exterior sicex.com se logró determinar que han ingresado al país productos de la japonesa, mediante una de sus unidades llamada Kobelco.

Sin embargo, se trata de un volumen limitado, de solo 1,4 tonelada, con productos como cadenas de rodillo, accesorios para tuberías y resortes helicoidales, importados principalmente desde plantas en Estados Unidos que no estarían afectadas por las malas prácticas. Pese a que son cantidades pequeñas, Gutiérrez destaca que los datos hablan de cierta vulnerabilidad del sistema, que se ha ido fortaleciendo en los últimos años, pero que todavía tiene margen para perfeccionarse. “No se trata de importaciones masivas sino específicas de productos de acero especiales, utilizados básicamente en maquinarias, minería e industrias, en procesos muy sensibles”, indicó Gutiérrez a Diario Financiero.

El experto pone como ejemplo el caso de los aviones, donde los accidentes no se producen necesariamente por una falla en la estructura del cuerpo del avión, sino que basta que falle un elemento tan pequeño como un perno. “Lo mismo pasa con el acero, con estas piezas pequeñas que tienen funciones muy específicas, como las conexiones, más aún en países sísmicos como Chile”, destacó.

En este sentido, el director ejecutivo de ICHA recomendó a las compañías hacer un análisis en profundidad de los certificados de calidad de las partidas importadas, pero no sólo en el caso de Kobe, sino de todos los productos, especialmente los que tienen un uso más masivo, como la construcción.

Extender los resguardos

El ejecutivo destacó que el caso de Kobe subraya la importancia del trabajo que desde hace años viene realizando el instituto junto con las autoridades, especialmente en el área de la construcción, y que a raíz del reciente escándalo cobra creciente importancia seguir extendiendo a más productos.

En Chile, los requisitos que debe cumplir el acero tanto para uso estructural como para barras de refuerzo para la construcción están estipulados en las normas chilenas NCh 203 y NCh 204 respectivamente, cuyo cumplimiento se establece mediante certificaciones de conformidad de producto emitidas por un ente acreditado por el Instituto Nacional de Normalización (INN), y su cumplimiento es de carácter obligatorio según lo señalado en la Ordenanza General de Urbanismo y Construcción (OGUC).

Un trabajo realizado por ICHA desde hace cinco años, denominado “Monitoreo a la Calidad de Aceros Importados. Producto: Barras de refuerzo” permitió detectar el ingreso y comercialización en el país de productos que no cumplían con la norma NCh204, razón por la cual desde entonces se ha reforzado el monitoreo y control, en estrecha colaboración con el Ministerio de la Vivienda y el Servicio Nacional de Aduanas.

Fruto de este esfuerzo, actualmente está en trámite un decreto que exige que para la importación de barras para la construcción, los certificados de conformidad de producto formen parte desde un comienzo de su carpeta de importación. “Hasta hace algunos años para importar barras de acero, el importador pagaba el impuesto correspondiente y listo. Desde que descubrimos fallas en el cumplimiento del acero importado, a partir de un oficio del Ministerio de Vivienda se implementó desde enero de 2016 la obligatoriedad de una declaración jurada de cumplimiento normativo. Ahora será aún más fuerte y ya no bastará una declaración jurada, ahora deberá adjuntar los certificados de calidad de sus productos a la carpeta de importación”, explica Gutiérrez.

Estos documentos deben ser emitidos por terceras partes no relacionadas con la compañía y que estén acreditadas por el INN, características que en Chile cumplen tanto el Dictuc como el Idiem. El esquema se va a implementar en una primera fase para las barras de refuerzo, pero el caso de Kobe ilustra la necesidad de seguir extendiendo el mismo mecanismo a otros productos, como los perfiles y planchas para estructuras de acero presentes mayoritariamente en centros comerciales, además de cubiertas y revestimientos de acero, que se utilizan en la construcción de viviendas, por ejemplo, en techumbres.

Rotulado para el acero

ICHA está trabajando también con los ministerios de Vivienda y Economía para implementar un sistema de rotulado de productos de acero. “Así como existe el rotulado de los alimentos, donde hay una forma estandarizada de informar el contenido crítico de los alimentos, que para los productos de acero también exista un etiquetado, mediante el cual, ya sea que se trate de una gran constructora o un pequeño constructor, pueda tener información suficiente para saber qué es lo que está comprando, específicamente en cuanto al cumplimiento normativo y de esta manera tener resguardo, una especie de sello de garantía de que en caso de una falla el agente que comercializó el producto va a responder y más que nada esta es también una acción preventiva”, señaló Gutiérrez.

ICHA es una organización que reúne a los principales actores de la cadena de valor del acero en Chile.

ICHA EN DF

El electivo está dividido en seis unidades temáticas desarrolladas a través de clases expositivas, ejercicios y análisis de casos, además, se incluyen visitas a obras, maestranzas y fábricas.

Como entidad preocupada por promover los usos del acero, y provocar cambios que permitan mejorar la operación de la cadena de valor del acero y de proveer capital humano para el desarrollo del rubro, ICHA por segundo año consecutivo está dictando un curso electivo denominado “Seminario de Ingeniería estructural: Tecnología del acero”, a estudiantes de 5° año de la carrera de Ingeniería Civil de la Universidad de Chile.

El curso está diseñado para que al finalizar las clases los estudiantes conozcan los distintos procesos de fabricación del acero, su ruta crítica, requisitos, funcionalidades, aceptación y rechazo. También se busca que los alumnos se interioricen del mercado del acero, producción local y suministro internacional, los distintos tipos y usos del acero, aplicaciones, potencialidades y subproductos de este material.

Junto con ello, el programa incluye clases para que los futuros ingenieros reconozcan el proceso de fabricación de estructuras de acero, identifiquen los aspectos críticos de la cadena, desde el punto de vista de la serviciabilidad y resistencia de las estructuras; y puedan especificar e inspeccionar adecuadamente las estructuras de acero. A la vez, como parte del curso, los estudiantes tuvieron la oportunidad de conocer en profundidad el Pabellón del Acero de ICHA en Expo Edifica 2017.

Este electivo está dividido en seis unidades temáticas: Procesos de Fabricación del acero, Productos de acero, Fabricación de estructuras de acero, Montaje de estructuras de acero, Protección de estructuras de acero, y Aseguramiento de calidad. Éstas son desarrolladas a través de clases expositivas con la participación de los estudiantes mediante ejercicios y análisis de casos, además, se incluyen visitas a obras, maestranzas y fábricas.

ICHA próximamente impartirá también este curso en las universidades de Talca y de Concepción.

 

 

 

Las ventajas y versatilidad del acero en construcciones de altura fueron destacadas en un amplio reportaje realizado por el programa “Agenda económica” de CNN Chile, con motivo de Expo Edifica 2017, evento en el que el Instituto Chileno del Acero (ICHA) participó por primera vez con un pabellón.

El reportaje, que mostró los avances de la construcción industrializada en países como China, también dio una mirada a la situación en Chile, detallando que en el país operan diversas empresas que están usando el acero en edificios y casas. También la nota enfatizó que este material permite aumentar la productividad del sector construcción, al minimizar plazos y costos.

En ese contexto, el director ejecutivo del Instituto Chileno del Acero (ICHA), Juan Carlos Gutiérrez, destacó los atributos del acero, que ya es utilizado intensamente en obras ligadas a la minería, para proyectos habitacionales.

En la misma línea, el gerente comercial de Edyce, empresa socia de ICHA, Sergio Sierra, mencionó el caso del Costanera Center cuyos pisos superiores están construidos en acero.

En la actividad, que se realizó a principios de octubre en Espacio Riesco, el Instituto Chileno del Acero (ICHA) informó sobre los últimos avances tecnológicos de la industria y las ventajas de un mayor uso de este material en los proyectos de construcción.

Demostraciones de construcción modular y evolutiva, fabricación de perfiles en vivo y edificación en acero, fueron algunas de las atracciones que mostró el Instituto Chileno del Acero en Expo Edifica 2017, feria internacional organizada por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y que se realizaró a principios de octubre en Espacio Riesco.

La entidad, que agrupa a ls actores más relevantes de la cadena de valor del acero, contó por primera vez con un pabellón, de 700 metros cuadrados, en el que estuvieron presentes siete empresas (CINTAC, FASTSTEEL, Edyce, Sherwin Williams, Gerdau, ECOMET e IMEL) mostrando su oferta productiva. Además, en el lugar se entregó a los más de 2.000 visitantes que lo recorrieron, material técnico y se realizó un circuito de demostraciones de aplicaciones e innovaciones en acero.

Una de ellas fue la construcción de una casa prefabricada, de CINTAC, con un baño modular, en la que se entregó información técnica y se efectuaron actividades de montaje y acoplamiento de piezas. Los asistentes obtuvieron datos de velocidades de construcción, costos, terminaciones, respuesta sísmica, protección contra el fuego, corrosión, térmico, y acústico.

“El objetivo fue informar a los profesionales de la construcción sobre las ventajas del acero, como su alta resistencia, durabilidad, rapidez de montaje y sustentabilidad ambiental, y que lo incorporen en sus futuros proyectos”, explicó el director ejecutivo de ICHA, Juan Carlos Gutiérrez.

En el Pabellón ICHA, que se ubicó al lado del acceso principal de la feria, se efectuaron demostraciones de la fabricación de perfiles a través de una máquina móvil que los conformó “en vivo”, es decir, operó una “mini fábrica en terreno” de la empresa Faststeel. A la vez, estuvo a disposición de los visitantes una edificación en acero, una estructura con detalles de conexiones, pinturas contra el fuego y revestimientos.

También en el marco de Expo Edifica, ICHA participó en el II Congreso “Innovación y Productividad en la Construcción”. El evento reunió al sector público, privado y académico para discutir cuáles son los desafíos de la industria en estas temáticas.

El director ejecutivo del Instituto, Juan Carlos Gutiérrez, expuso el caso Torre Santa María II. El nuevo proyecto del emblemático edificio de Providencia incorporó, al núcleo de hormigón, columnas perimetrales en acero. “En la presentación se comparó el diseño de esta torre con la anterior, con especial atención a las tecnologías, plazos de ejecución, dotaciones de personal, sustentabilidad y terminaciones y las ventajas que ofrece incluir el acero en edificaciones de este tipo”, destacó Gutiérrez.

En la charla se dio a conocer, además, la capacidad y experiencia de la industria chilena del acero desarrollada en la minería, y su transferencia a otros sectores, como la construcción.

De acuerdo a información de ICHA la cifra representará una baja de 0,1% respecto a la registrada en 2016.

Una leve baja de 0,1% experimentará el consumo aparente de acero en el mercado nacional durante 2017, llegando a 2,7 millones de toneladas, según proyección realizada por ICHA). De esa cifra total, 1,7 millones de toneladas corresponderán a importaciones y un millón a despachos nacionales.

Al hacer un desglose por oferente, se espera que al cierre del año los despachos nacionales aumenten en 2,1% y que las importaciones bajen en 1,4%.

Por formato, los más consumidos en el país son los aceros largos (barras, perfiles, alambrón, etc.) que se estima alcanzarán a 1,4 millones de toneladas al terminar este año, y los aceros planos (laminados, planchas, revestidos, etc.) con 1,1 millones de toneladas.

Cabe destacar que desde 2012, cuando se registró el peak de consumo interno, al llegar a 3,1 millones de toneladas, la demanda por acero se ha mantenido prácticamente estable, rondando los 2,7 millones de toneladas.

“El crecimiento de la demanda de acero va de la mano con el dinamismo que tenga la inversión en nuevas obras de infraestructura y construcción. Por ejemplo, entre 2000 y 2008, el consumo aparente de acero tuvo un alza de 1,3 millones de toneladas, periodo que coincidió con una tasa de crecimiento promedio trimestral de la inversión de 14,6%”, sostuvo el director ejecutivo de ICHA, Juan Carlos Gutiérrez.

Sin embargo, agregó, desde 2015 tanto la inversión en nuevos proyectos como los permisos de edificación se han estancado, lo que repercute en la demanda por este material.

Importaciones enero-junio

Con respecto al comportamiento de las importaciones, ICHA detalló que en enero-junio experimentaron un aumento del 7,5%, respecto de igual período de 2016, alcanzando a las 972. 795 toneladas.

Por productos, los más relevantes en el período fueron los aceros planos, con 698.671 toneladas y un alza del 18%. En este formato de productos, los más relevantes en volumen son los aceros planos laminados en caliente (256.732 toneladas) y los revestidos (246.309 ton). Ambos crecieron en 11% y 19%, respectivamente.

Más atrás se posicionaron, en cantidad, los formatos de aceros largos (barras, alambrón, perfiles) con 206.452 ton y una baja de 21% en relación a los primeros seis meses del año anterior.

América Latina y el Caribe se caracterizan por una urbanización consolidada, con un 79,5% de su población, en promedio, radicada en áreas urbanas. El principal desafío de la gestión urbana es mejorar la calidad de vida y lograr la sostenibilidad en las ciudades (CEPAL, 2016). En varios países de la región, los fenómenos naturales extremos como los terremotos, además de ocasionar riesgos para la vida y el bienestar de las personas, afectan directamente la economía y la infraestructura de sus centros urbanos.

Por consiguiente, un adecuado diseño sismorresistente resulta necesario para proyectar edificaciones menos vulnerables, resilientes, sostenibles y accesibles, con el fin de reducir de forma significativa el número de muertes, de personas afectadas y las pérdidas económicas luego de la ocurrencia de un terremoto, como lo establece el Objetivo 11 de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (ONU, 2017).

De acuerdo con el reporte del Global Construction Perspectives & Oxford Economics de 2015, la construcción será probablemente uno de los sectores industriales más dinámicos dentro de los próximos quince años, un suceso crucial para la evolución de las sociedades. Como respuesta a las nuevas necesidades de progreso, la tendencia mundial es utilizar el acero estructural como material de construcción para edificaciones urbanas (edificios residenciales, de oficinas, hoteles, centros comerciales, estacionamientos, escuelas y hospitales) en las principales ciudades del mundo. De hecho, las estructuras de acero han sido siempre consideradas como una solución adecuada para construcciones en zonas de alta sismicidad (Giouncu, 2013).

Propiedades como resistencia, rigidez y ductilidad hacen del acero un material con mejor desempeño a través de todo el ciclo de vida de las edificaciones. Entre las fortalezas que brinda el acero estructural en la construcción de edificios frente a otros materiales, destacan la flexibilidad arquitectónica, mayor velocidad de construcción, reducción del peso de la estructura, así como empleo de mano de obra más especializada, siendo esto una relación directa con el aumento en la calidad y rentabilidad de la obra terminada.

Según datos de la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero), 51% del acero de la región se destina a la construcción. Sin embargo, a diferencia de otras regiones del planeta, el acero como material estructural se encuentra particularmente concentrado en el sector industrial minero y petrolero. En consecuencia, toda investigación que permita avanzar en el entendimiento de su comportamiento y la reducción de la vulnerabilidad sísmica en aplicaciones para edificaciones urbanas está directamente relacionado con el desarrollo productivo y social de nuestras ciudades.

Los sismos de Northridge (1994) y Kobe (1995) permitieron estudiar las deficiencias en el diseño sísmico de estructuras en acero, específicamente de sus conexiones. Los códigos de diseño vigentes en EEUU, contemplan el uso de conexiones debidamente certificadas y calificadas para su uso en zonas de elevada amenaza sísmica. Esto ha permitido la implementación confiable de sistemas estructurales en acero orientado a la ejecución de viviendas de interés social en América Latina. Como consecuencia, numerosas edificaciones han incorporado conexiones soldadas, las cuales, siempre tienen como desventaja la ejecución en terreno y su control de calidad, motivando la búsqueda de nuevas conexiones que permitan soluciones apernadas entre perfiles “wide-flange”, adaptadas a la práctica constructiva de la región.

En este sentido, en la Universidad de Chile se llevó a cabo una investigación numérica y experimental de uniones a momento entre perfiles I (“wide-flange”) usando perfiles T soldados, enmarcado en el proyecto FONDECYT N° 1140628, donde se logró caracterizar el desempeño de esta conexión. La conexión de tipo doble T cortada (DST: Double Split T), compuesta por dos perfiles T apernados llamados T-stubs, es una de las conexiones precalificadas incluida en las recomendaciones FEMA 350 y AISC 358-2016. Sin embargo, las investigaciones que avalan su uso se han llevado a cabo en T-stubs fabricados a partir de secciones laminadas, generando la necesidad de indagar más sobre T-stubs soldados, considerando que éstos presentan ventajas por sobre los laminados, en términos de mejor uso de material, libertad de dimensionamiento, y disponibilidad en Chile.

Como resultado, se obtuvo la caracterización de la conexión mostrando un desempeño favorable, cumpliendo con los requisitos y procedimientos establecidos en normas AISC, obteniendo:
1. Mayor libertad de dimensionamiento que resulta en un diseño más óptimo que cuando se utilizan perfiles laminados.

2. Un ensamblaje que no requiere soldaduras en obra, las cuales poseen una mayor dificultad para realizarse, suelen ser más costosas y requieren de personal calificado para su materialización, factores que pueden llegar a afectar su calidad.

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Figura 1. Conexión DST

 

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Figura 2. Conexión DST en fase experimental.

A partir de dicho estudio, una nueva propuesta de conexiones pretende abordar una caracterización más amplia de conexiones empleando columnas tubulares tipo Hollow Structural Sections, teniendo en cuenta la interacción entre carga axial y la resistencia a flexión biaxial que se presentan en este tipo de conexiones, así como el estudio de nuevos patrones o protocolos de carga considerando la flexión biaxial. En la actualidad, tales efectos no han sido incorporados en las disposiciones AISC-341 y AISC-358, las cuales representan los lineamientos a seguir en el diseño de edificaciones de acero en zona sísmica en la región.

Figura 3. Conexión a momento tipo EP-HSS

Figura 3. Conexión a momento tipo EP-HSS

De esta forma, la actual línea de investigación espera dar respuesta confiable en términos probabilísticos cuantificando las incertidumbres que gobiernan los mecanismos de falla y la participación de los componentes de las conexiones, además del nivel de incidencia en el diseño de dichos componentes, con la firme convicción de que en Latinoamérica podemos aportar soluciones adaptadas a la práctica constructiva regional y la amenaza sísmica de la misma.

*Por: Eduardo Nuñez, Ph.D., Ricardo Herrera, Ph.D.

DESCARGAR PRESENTACIÓN “ESTUDIO EXPERIMENTAL DE CONEXIONES DE MOMENTO USANDO PERFILES T SOLDADOS” (PDF)

Nació en Seúl, Corea. Posteriormente se trasladó a Japón, graduado por la Universidad de Tokio, Departamento de Arquitectura en 1965. Trabajó durante cuatro años en la oficina de Kiyonori Kikutake Arquitectos y Asociados. En 1971 inauguró su propia empresa “Urbot” (Urban Robot) en la capital japonesa y, en 1979, cambia su nombre al de Toyo Ito & Associates Architects, iniciando un periodo de expansión internacional.

Sus primeros proyectos, como la “Casa de Aluminio” fueron estructuras de madera recubiertas de ese metal. La casa que diseñó  para su hermana, la famosa “White U” fue el edificio que lo hizo famoso.

Es considerado uno de los arquitectos más innovadores del mundo, sus primeros trabajos fueron la Silver Hut y el mobiliario de la Chica Nómada de Tokio.

Su obra combina la innovación conceptual con edificios magníficamente ejecutados. Su arquitectura mantiene edificios atemporales, con los que audazmente propone nuevos caminos en proyectos diferentes como bibliotecas, casas, parques, teatros, tiendas, edificios de oficinas y pabellones, siempre tratando de ampliar las posibilidades de la arquitectura.

Es autor de libros como “El Jardín de Microchips” “Hacia la arquitectura del viento”. En 2013 fue galardonado con el premio Pritzker, la distinción más importante en el mundo de la Arquitectura, convirtiéndose en el sexto japonés que obtiene este reconocimiento.

Además, ha recibido el Architecture Institute of Japan Award; el Mainrich Art Award; el IAA ‘Interach 97’; Gran Premio de la Unión de Arquitectos en Bulgaria Medalla de Oro; el Premio del Ministerio de Educación Japonés; el Arnold W. Brunner Memorial Prize en Arquitecture de la Academia Americana de Artes y Letras; la Medalla de Oro en el Premio Japonés al Diseño; la Medalla de Oro del RIBA; la Medalla de Oro de Bellas Artes otorgada por el Círculo de Bellas Artes, y el Praemium Imperiale.

 Algunas de sus obras:

  • Edificio Tod’s Omotesando (Tokio, Japón)
  • Torre de los Vientos (Yokohama, Japón)
  • Pabellón para la Expo 2000 (Hannover, Alemania)
  • Edificio Suites Avenue (Barcelona, España)
  • Ken Iwata Mother and Child Museum (Imabari, Japón)

 

En el encuentro el presidente de ICHA, Sergio Contreras, compartió sus lineamientos estratégicos de desarrollo futuro de la institución.

Con alta asistencia se efectuó el encuentro especial del presidente de ICHA, Sergio Contreras, con los asociados, ocasión en la que compartió los lineamientos de desarrollo futuro de la institución. La actividad, además, contó con la presentación de ex ministro de Obras Públicas y Minería, Hernán de Solminihac, quien delineó los desafíos que enfrenta el país en materia de inversiones en infraestructura.

En el evento, el actual integrante del equipo programático del candidato Sebastián Piñera y académico de la Universidad Católica, destacó que la infraestructura es clave para reactivar la economía; mejorar la productividad; aumentar el empleo; entrega mayores oportunidades a las pymes y atrae inversión extranjera.

En su presentación De Solminihac detalló los ejes programáticos de un eventual nuevo gobierno de Piñera, en materia de infraestructura: Conectividad, Ciudad y movilidad; Institucionalidad y Agua. Explicó, además, que todos los proyectos contemplados en este ámbito están incorporados en el Plan Chile Invierte 2026.

En términos generales, resaltó que faltan buenos proyectos de infraestructura y hay una cartera insuficiente de iniciativas a licitar, por lo que es urgente buscar mecanismos que permitan activar la inversión principalmente privada ya que la capacidad del Estado no es suficiente.

En Conectividad, señaló que los esfuerzos estarán puestos en mejorar la Ruta 5 que hoy presenta varios puntos vulnerables, principalmente en las regiones del Maule y Biobío. “El objetivo es impulsar proyectos en esta ruta y carreteras secundarias. También en la Carretera Austral y avanzar en pasos fronterizos viables y realistas”, dijo.

Con respecto a Ciudad y Movilidad, De Solminihac explicó que las iniciativas principales se enfocarán a: diseñar infraestructura vial estructurante con aporte urbano; igualar estándares de aceras y vialidad local; avanzar en infraestructura de transporte de alto estándar; e incorporar nuevas tecnologías e innovación en movilidad.

En este ámbito, agregó que el programa de Piñera considera un plan, a desarrollarse a 10 años, que incluye 125 kms nuevos de metro y trenes urbanos para Santiago con una inversión de US$ 7.350 millones. “Subiríamos -afirmó- de 2,5 millones a 4,5 millones de pasajeros/día y los tiempos de viaje de dos millones de personas se reducirían en 40%”.

Finalmente, en materia de institucionalidad, el ex ministro indicó que es importante que sea un marco regulatorio, pero no una traba para los inversionistas. “En esta línea, estamos trabajando -comentó- para simplificar, gestionar y agilizar el sistema de tramitación ambiental. Además, es necesario revisar y mejoro las bases de licitación con respecto al riesgo ambiental; incorporando nuevas obras y cambios de estándar”.

Lineamientos estratégicos

También en el encuentro, el director ejecutivo de ICHA, Juan Carlos Gutiérrez, entregó las proyecciones de consumo aparente de acero para este año.

Al cierre, Sergio Contreras expuso a los socios sus lineamientos estratégicos de desarrollo de la institución, los que implican una modificación de los estatutos. Próximamente ICHA enviará a las empresas asociadas una propuesta para su ratificación en asamblea extraordinaria.

El Instituto Chileno del Acero (ICHA), en su rol de referente técnico del mercado del acero, es el organizador de la gira de prospección tecnológica a Nueva Zelandia y Australia denominada “Misión Tecnológica Oceanía 2017”, desarrollada entre el 01 y 10 de septiembre, y enfocada en la construcción industrializada en acero, con énfasis habitacional, comercial, educacional e industrial.

La actividad está orientada a conocer el desarrollo técnico–regulatorio en aspectos de control de trazabilidad y gestión de calidad, cumplimiento normativo, ingeniería sísmica y protección contra incendios, y tiene como objetivo identificar las potenciales iniciativas a implementar en Chile.

Durante la primera jornada en Nueva Zelandia, los representantes de las empresas Cintac, Indama, Imel, Aceros Tecnológicos, Multiaceros e ICHA realizaron una visita a obras de construcción habitacional en acero, y a la compañía Interlink Modular la que a partir de una iniciativa público privada está efectuando un proyecto de 1.000 escuelas modulares, cada una configurada en 9 módulos y fabricada en 12 días.

A la vez, participaron de una reunión con el National Association of Steelframed Housing (NASH), y el Steel Construction New Zealand (SCNZ), en la que se estableció un acuerdo de colaboración entre ICHA, NASH y SCNZ, identificando las coincidencias en materias normativas y regulatorias con aduana, diseñadores, fabricantes, distribuidores y constructores.

Posteriormente, se realizó una visita a Framecad donde se efectuó una demostración de la fabricación de perfiles para cercha, con una duración de fabricación de 12 minutos desde el fleje, pasando por conformado, cortes, y uniones apernadas.

Cabe destacar que la gira se enmarca en las iniciativas del Consejo para la Construcción Industrializada, perteneciente al programa CORFO Construye 2025.

Nació en Canadá en 1929, posteriormente adoptó la nacionalidad estadounidense. Fue un aplicado estudiante de arquitectura, graduándose en 1954 de la Universidad de Southern, California. Con el título de arquitecto trabajó en varios despachos de prestigio, mientras estudiaba Urbanismo en la Escuela de Diseño de Harvard. Vivió una larga temporada en Europa, hasta que en 1962 abrió su despacho en Los Ángeles. La década siguiente la dedicó a la docencia impartiendo clases en las universidades de Harvard y Yale.

Es considerado uno de los más destacados representantes de la corriente deconstructivista de Estados Unidos, destaca de su particular estilo las formas semidescompuestas y su idea de que un “edificio, una vez terminado, debe ser una obra de arte, como si fuese una escultura”.

La creencia que “la arquitectura es arte” ha llevado a Frank Gehry a cambiar el rumbo de la misma a partir de la segunda mitad del siglo XX. Después de lanzar su línea de muebles de cartón corrugado Easy Edges (1969-1973), empezó la remodelación de su casa en Santa Mónica, California, y con ésta a marcar su diseño de vanguardia. Un ejemplo de la estética post-estructuralista deconstructivista que desafía abiertamente el paradigma del ideal modernista de “la forma sigue a la función” que llamó la atención del mundo de la arquitectura y, tras esto, comenzó a diseñar casas, similares a la suya, en el sur de California en los años 80.

Gehry realiza un trabajo arquitectónico minucioso, una sutil mezcla de visión perceptible en sus famosos bocetos y maquetas. Se caracteriza por ser un dibujante apasionado, primer paso de su concepción arquitectónica, ya que luego convierte sus bocetos en modelos tridimensionales tangibles, a menudo hechos con cartón y cinta adhesiva, para luego proyectarlos en edificios de titanio, vidrio, hormigón, acero, madera o piedra.

Es una celebridad mediática, nombrado por Vanity Fair como  “el arquitecto más importante de nuestra época” y haciendo apariciones en programas de televisión como Los Simpsons, sus diseños han recibido más de 100 premios en todo el mundo, incluyendo el Arnold W. Brunner Memorial Prize (EE.UU., 1977), el Premio Pritzker (1989), el Wolf de las Artes Israel (1992), el Praemium Imperiale (Japón, 1992), el Dorothy and Lillian Gish (1994), el Premio FriedrichKiesler (Austria ,1998) y el Twenty Five Year Award del Instituto Americano de Arquitectos (2012).

Además posee la Medalla Nacional de las Artes de los Estados Unidos (1998), la Medalla Lotos al Mérito (EE.UU., 1999), la Medalla de Oro del Instituto Americano de Arquitectos (1999) y la Real Medalla de Oro a la promoción de la arquitectura (2000), que otorga la Reina de Inglaterra.

 Algunas de sus obras:

  • Dancing House  (Praga – Republica Checa)
  • Guggenheim Museum (Bilbao – España)
  • Walt Disney Concert Hall (Los Angeles – EE.UU)
  • Millenium Park (Chicago – EE.UU)
  • Stata Center (Massachussets – EE.UU)
  • Weisman Art Museum (Minnesota – EE.UU)