El Instituto Chileno del Acero y la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile, recientemente firmaron un convenio destinado a profundizar en la investigación de la construcción industrializada en acero. De esta forma se concreta una importante relación entre la academia y un organismo técnico privado como el ICHA y que, según el Decano Manuel Amaya, sirve para “generar conocimiento fundado en una realidad específica, que permita retroalimentar la Investigación, la docencia, la creación y la extensión.

Destaca el facultativo que el país requiere de este tipo de convenios y de hacerlos efectivos. Señala que “se hacen cada vez más urgentes en cuanto expresión del trabajo colaborativo, lo cual es una necesidad evidente luego de las crisis que estamos viviendo”.

Acuerdos como el descrito, benefician al país en general, ya que permite investigar nuevos usos para el acero, así como sistemas constructivos más eficientes, rápidos, baratos y amigables con el medio ambiente. Según el Decano Amaya “la importancia para la Industria del acero es la generación de un espacio de reflexión, al interior de la Universidad de Chile, como universidad pública, estatal y nacional, caracterizada por su pensamiento crítico y visión multidisciplinaria, que potencia el uso del material y promueve la innovación en su diseño y procesos constructivos”.

Manuel Amaya finaliza diciendo que este acuerdo abre también un espacio de investigación teórica y aplicada “donde estudiantes de la Escuela Nocturna para Obreros de la Construcción (ENOC), estudiantes de pre y postgrado de nuestras diferentes carreras y académicos puedan propiciar la innovación y el desarrollo sostenible del área”.

Sólo 17 días demoró la construcción del módulo ZonaCero, esto gracias al diseño propuesto por profesionales de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile y que se basó en las sugerencias que realizaron los médicos del Hospital Clínico de esa casa de estudios. Todo esto pudo plasmarse con la participación activa del Instituto Chileno del Acero, que coordinó la generación de los cálculos de ingeniería y las empresas socias que suministraron los perfiles, paneles y cubiertas de acero necesarias para levantar este piloto utilizando un sistema de construcción industrializada.

Durante el foro “Proyecto ZonaCero: Idea, gestión, materialización y futuro”, el jefe de urgencias del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, César Cortés, señaló que más de 500 personas con patologías de baja complejidad ya han sido atendidas en este módulo especial, fortaleciendo la segregación de las personas y ayudando a descongestionar de manera importante las dependencias del centro médico. En promedio, dijo, se están atendiendo entre 50 a 70 personas diariamente, mostrando una tendencia a la baja en los últimos días.

En dicho foro participaron los arquitectos que desarrollaron el proyecto bajo la coordinación de Alastair Aguilera, además del director ejecutivo del ICHA, Juan Carlos Gutiérrez, el decano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile, Manuel Amaya, la vice rectora de extensión de esa casa de estudios, Faride Zerán, además de la directora del Hospital J.J. Aguirre, Graciela Rojas y el jefe de urgencias del establecimiento, César Cortés.

El doctor Cortés señaló que “ZonaCero era muy necesario dentro de la vorágine de la pandemia” y que le llamó la atención la planificación y rapidez en la construcción del módulo y la calidad de ésta.

Al respecto, Juan Carlos Gutiérrez, director ejecutivo del ICHA señaló que tanto los diseños estructurales como los materiales utilizados cumplen con todas las normas técnicas aplicables. Prueba de ello, señaló, es que no presentó ningún problema durante el último temporal que afectó a Santiago.

“Desde hacía tiempo el ICHA venía estudiando aplicaciones y construcciones en acero que pudieran servir de aporte a la comunidad, como viviendas de emergencia y centros comunitarios.  La aparición de la pandemia fue el motivador para colocarnos a trabajar junto a la FAU y poder conectar a las empresas para que apoyaran construcción de ZonaCero y dar una mirada global de país, y cómo los atributos del acero pueden contribuir a la sociedad civil”, señaló Juan Carlos Gutiérrez.

Alastair Aguilera, por su parte, informó que todos los detalles del proyecto, sus planos y fichas técnicas están disponibles en forma gratuita en la página web www.proyectozonacero.cl. En el sitio se destaca el aporte de empresas privadas, entre ellas las socias ICHA CINTAC, VH, y Sherwin Williams además del ICHA, la FAU y la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Chile, entre otras.

La directora del hospital J.J. Aguirre, Graciela Rojas, dijo que ZonaCero y la tecnología utilizada para construirlo, seguirán aportando a la atención de pacientes, pues aún cuando termine la pandemia, se deberán mantener algunas medidas de higiene y seguridad, como el distanciamiento mínimo entre personas, por lo que los recintos del hospital tendrán que ser reacondicionados.

Luego de la culminación con éxito de la construcción del piloto del proyecto ZonaCero, el Instituto Chileno del Acero, ICHA, y la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile, concretaron su relación firmando un acuerdo de colaboración para profundizar en la investigación de la construcción industrializada en acero y de los beneficios que ella pueda tener en la calidad de vida de las personas, el cuidado del medioambiente y la productividad de las empresas constructoras.

Se estipula en el convenio que para alcanzar los objetivos mencionados “resulta clave trabajar en conjunto en áreas de interés mutuo para ambas instituciones, ante lo cual, la FAU y el ICHA expresan su intención de establecer una colaboración y cooperación en la realización de actividades que se acuerden en beneficios de las partes y de comunidades como objetos de estudio”.

El compromiso del ICHA es utilizar su condición de referente técnico en el uso del acero en Chile para promover junto a la FAU investigación y capacitación dirigida a impulsar soluciones constructivas en acero y la industrialización de ésta en el país.

Alberto Maccioni, Presidente del ICHA señaló al respecto de la firma de este convenio que “La FAU es de nuestra más alta importancia, en consideración a que nos permite avanzar decididamente en la puesta en marcha del Centro de Innovación en Acero, estableciendo una vía directa para la investigación, el análisis y la ejecución de soluciones constructivas de alto impacto para el país”

Agregó que el liderazgo y la coordinación de la FAU junto a la experiencia y el conocimiento técnico de ICHA, permiten constituir una mesa de trabajo público – privada, atendiendo los desafíos que experimenta nuestro país en materias de viviendas sociales, construcción hospitalaria y edificación pública.

Coincidente con lo anterior, Manuel Amaya, Decano de la FAU indicó que la importancia del acuerdo radica en establecer una relación directa con el ICHA, que alberga una cantidad importante de empresas e ingenieros quienes “ ven la oportunidad y posibilidad desde el mundo académico de generar un Centro de Innovación en Acero, ente que, con el apoyo del MINVU a través de la DITEC y de otras facultades de la Universidad de Chile como la FCFM, se convierta en un referente en materia de construcción en acero para el país”.