Más de treinta funcionarios de distintos departamentos de este organismo público participaron de las jornadas de capacitación realizadas por el Instituto Chileno del Acero (ICHA) en San Antonio y Valparaíso los días 8 y 11 de noviembre, respectivamente.

Juan Carlos Gutiérrez, director ejecutivo del ICHA, y Verónica Reveco, jefe de proyectos de esta misma institución, viajaron a la V Región de nuestro país para reunirse con los profesionales de Aduanas y transmitirles la experiencia de ICHA en cuanto inspecciones y clasificación de aceros con miras a mejorar cada vez más la fiscalización y control de los productos que ingresan a Chile. En este sentido, el principal foco de la capacitación fue cooperar con Aduanas en el análisis y revisión de las carpetas existentes, que contienen los documentos con los antecedentes de las importaciones.

Los conocimientos impartidos y la colaboración de ICHA fue muy valorada por los participantes de la jornada. “El balance de esta actividad fue muy positivo, sin duda es un paso muy importante para fortalecer las competencias técnicas de los profesionales de Aduanas”, cuenta Juan Carlos Gutiérrez.

Desde hace algún tiempo, el Servicio Nacional de Aduanas ha implementado y adoptado distintas medidas anti distorsiones de precios, las que se aplican a determinados productos. Para poder identificar esos productos adecuadamente y saber si estos cumplen o no dichas medidas, hay cierta terminología y clasificación muy importante que se debe manejar. Dentro de este contexto, ICHA se comprometió con el Servicio Nacional de Aduanas en hacerles llegar un muestrario de productos de acero, con sus nombres técnicos, códigos y otros aspectos relevantes, para que este organismo pueda utilizarlos en su labor fiscalizadora.

La institución sin fines de lucro participó junto al OCI en el encuentro de mesas sectoriales de la Alianza Latinoamericana Anti-Contrabando.

El Instituto Chileno del Acero (ICHA) selló su ingreso al Observatorio del Comercio Ilícito, formando parte del grupo de industrias afectadas por el comercio ilegal. Esta institución privada, sin fines de lucro, articula a los distintos componentes de la Red de Valor del Acero con el objetivo de impulsar nuevos usos y soluciones en acero junto a un adecuadonivel de exigencias técnicas y de fiscalización.

El trabajo contra el comercio ilegal de ICHA llevó a que participara junto al Observatorio del Comercio Ilícito en el “Primer Encuentro de Mesas Sectoriales” de la Alianza Latinoamericana anti-Contrabando (ALAC), en Bogotá a inicios de octubre.

“Como Observatorio tenemos las puertas abiertas a integrar a todas las industrias que estén interesadas en combatir activamente el comercio ilícito y fomentar la cultura de respeto a la propiedad intelectual”, afirmó la directora ejecutiva del OCI, Bernardita Silva.

De acuerdo a las cifras entregadas por el Instituto Chileno de Acero, en Chile el consumo aparente de acero en 2015 ascendió a 2,79 millones de toneladas, donde el 65% es de origen importado.

Por su parte, Juan Carlos Gutiérrez, director ejecutivo del Instituto Chileno del Acero señaló “Para potenciar el desarrollo de soluciones en acero, es fundamental el cumplimiento de las especificaciones técnicas, por lo que consideramos que el observatorio del comercio ilícito – OCI puede elaborar estudios para dimensionar el comercio ilícito del material”.

Así, ICHA pasa a formar parte del OCI al igual que las industrias de la música y películas, libros, softwares, tabaco, juguetes, vestuario, calzado y accesorios, cosmética, tv de pago y turismo.

Después de cerca de tres años de trabajo especializado, la propuesta del Instituto Chileno del Acero (ICHA) de actualización de la NCh 427 “Especificaciones para el cálculo, fabricación y construcción de estructuras de acero”, fue aprobada por el Instituto Nacional de Normalización (INN).

En estos momentos, la norma ya se encuentra disponible en la web www.inn.cl y próximamente será oficializada a través del Ministerio de Obras Públicas.

Labor especializada

A través de un comité de actualización de norma, la iniciativa se trabajó al interior de ICHA con profesionales relevantes en el diseño y especificación de estructuras de acero en Chile como ingenieros estructurales, representantes de la industria, consultores independientes y académicos, entre otros.

Según comentó en la ocasión el coordinador del Comité de Norma ICHA, Alejandro Verdugo, se detectó la necesidad de contar con un documento oficial y actualizado, imprescindible para la industria de la construcción en acero: “Al no existir una normativa de vigencia legal respecto de la calidad de los productos que se importan y utilizan en el país, los fabricantes nacionales se sentían en condiciones desmejoradas al momento de competir”.

El trabajo de actualización consideró, principalmente, la normativa estadounidense contenida en la AISC-360 para el diseño de estructuras de acero de la American Institute of Steel Construction, AISC.

Atendiendo que la actualización previa de la NCh 427 databa de 1977, ya se había hecho obsoleta a la práctica chilena. Por tanto, desde hace un tiempo se habían adoptado los criterios estadounidenses como de uso común en el mercado del acero en Chile.

De esta forma, el comité ICHA trabajó sobre la base de las normas de la AISC como parámetro de aplicación, “hecho que además -de alguna forma- tiene un soporte legal en cuanto las normas de diseño sísmico indican que, a falta de una normativa nacional, se debe seguir la normativa norteamericana”, sostuvo Verdugo.

El trabajo del comité incluyó la revisión de lo establecido en el documento de AISC y la adaptación en algunos criterios relacionados con la praxis en Chile.