Una comitiva de 54 diplomáticos se reunió en la planta de AZA, en Colina, como parte de una reunión especial del Consejo Económico y Social de Naciones Unidas (ECOSOC) que se realiza en Santiago.
Se trata de la segunda ocasión que dicho organismo sesiona en Chile desde su creación en 1946, la primera vez fue en 1951. Además, esta visita tiene especial relevancia, ya que se enmarca en el período de la presidencia de Chile en el ECOSOC, la que comenzó en julio de 2023.
Aceros AZA, empresa socia del Instituto Chileno del Acero, ICHA, fue escogida como puntapié inicial de la visita por sus altos estándares de sostenibilidad ambiental y social, siendo la siderúrgica con menor huella de carbono de Chile, además de sus reconocidas prácticas laborales. La actividad fue encabezada por la embajadora de Chile ante la ONU, Paula Narváez, junto al gerente general de AZA, Hermann von Mühlenbrock.
Al respecto, la embajadora Narváez destacó que “esta visita es de gran importancia, ya que tiene relación directa con lo que abordaremos en la reunión especial del ECOSOC: los diversos caminos hacia una sociedad global productiva, que sea integradora y sostenible. El cuidado al medioambiente y la integración de mujeres en la fuerza laboral deben ser asuntos fundamentales no solo para AZA, sino para todos los actores de la comunidad global”.
“Aquí elaboramos el acero con menor huella de carbono del país, un acero que nace en su totalidad desde el reciclaje y que es parte de un gran modelo de economía circular. Por eso, estamos orgullosos con esta visita, ya que también es un reconocimiento a nuestra manera de hacer las cosas”, afirmó Von Mühlenbrock.
Durante la actividad, además se abordaron temáticas claves para el futuro de la economía, como la crisis climática y el trabajo decente, situando a algunas empresas locales, como AZA, como referentes en la materia.
El ECOSOC aborda materias económicas, sociales, y de desarrollo. Asimismo, desempeña un rol coordinador de las labores de Naciones Unidas y de los organismos especializados.
“Nuestra motivación actual es aportar al país, desde el punto de vista normativo, nuestra experiencia como compañía metalmecánica”, este es uno de los principales objetivos de la incorporación de Reinike al Instituto Chileno del Acero, así lo señaló el gerente general de la empresa, Enrique Rodríguez.
Reinike es una empresa fundada en 1989. Comenzó fabricando pernos e insertos de acero. Para luego expandirse a la fabricación de estructuras metálicas y soldaduras especializadas, siendo hoy uno de los principales especialistas en la fabricación de estanques, elementos de calderería y equipos de procesos.
Sus principales clientes pertenecen a las industria de la minería, infraestructura y energía. “Somos una empresa que siempre ha estado en desarrollo, innovando e incorporando nuevos sistemas de fabricación y montaje para nuestros productos. Ofrecemos en nuestros proyectos un servicio integral, abarcando el diseño, la ingeniería de detalle, la fabricación y el montaje en faena”, señaló Rodríguez.
Respecto de su interés por incorporarse el ICHA, el ejecutivo indicó que “la participación en organizaciones técnicas y gremiales es otro paso en el crecimiento de nuestra empresa”. Agregó que uno de los objetivos iniciales es integrarse activamente al Comité de Estanques del ICHA.
La estructura contempla un viaducto de 1,8 kilómetros de largo con 2 vías electrificadas para el uso mixto de trenes de carga y pasajeros. Estará fundada en base a pilotes, sobre los que se apoyarán vigas de acero tipo cajón, fabricadas en su totalidad por EDYCE Metalúrgica S.A. en su planta en Talcahuano y en instalaciones especialmente habilitadas a orillas del río Bio-Bio para este proyecto.
Tomás Fischer, Director Ejecutivo de EDYCE, explica que se utilizarán 6.200 toneladas de acero, necesarias para fabricar 62 bateas, cada una pesa un promedio de 100 toneladas. Las dimensiones de estas piezas hacían muy difícil su traslado desde la planta que la empresa tiene en Talcahuano hasta la obra. Así, dice el ejecutivo,” en la planta se construyen hasta la mayor dimensión que permite su traslado y son terminadas en su máxima dimensión a orillas del río”.
Esta es la mayor obra de infraestructura pública en la que participado EDYCE. “Esta es una obra icónica a nivel nacional y mundial y la está desarrollando una empresa regional y eso es digno de destacarse”, señala Fischer.
“El nuevo puente se está construyendo con las más altas técnicas de diseño sismorresistente, con metodología BIM, software especializados de diseño y detallamiento estructural y normas sísmicas vigentes en el país y que aplican para este tipo de obras. Además, todos los diseños son sometidos a revisiones estructurales como lo establece la norma chilena, una de las más exigentes a nivel mundial”, señala Fischer. Todo esto, para que el nuevo puente dure al menos 100 años.
La obra debe estar concluida a principios del próximo año y permitirá reemplazar el actual y mejorar significativamente el estándar del tráfico ferroviario: 100 km/hr para trenes de pasajeros y 65 km/hr para trenes de carga.