Contento, sorprendido e inmerecido; esas fueron las primeras reacciones de Ramón Montecinos cuando le preguntamos por su premio de Ingeniero del Año otorgado en el 14° Encuentro Anual de la Asociación de Ingenieros Civiles Estructurales, AICE.

El profesional forma parte del Comité Técnico del ICHA desde 2015, también del comité de la norma NCh2369 y es uno de los autores del libro “Proyectar en acero. Práctica Chilena”, en los Capítulos de Cargas y combinaciones y del Capítulo de Conexiones.

Ramón Montecinos es Ingeniero Civil de la Universidad de Chile, consultor en Ingeniería Estructural y Diseño Sismorresistente. Cuenta con más de 40 años de experiencia en el mundo del diseño de estructuras. Es profesor de Proyecto de Estructuras de Acero de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas en la Universidad de Chile desde 1991 a la fecha, y del Diplomado de Estructuras Industriales de la Universidad de Los Andes, desde 2020 a la fecha.

Montecinos destacó como un “acierto” la formación del Comité Técnico del ICHA, pues está conformado por destacados profesionales y “posiblemente es la voz técnica más autorizada en Chile en estos temas. Para proyectarse necesita apoyo profesional: investigación de los temas que le interesan al acero en las universidades, posibilidad que oficinas de ingeniería hagan estudios   y calibraciones de los nuevos métodos”.

Refiriéndose al libro “Proyectar en Acero. Práctica Chilena” destacó que es una obra más conceptual que meramente destinada al cálculo, lo que permite que sea una “buena introducción a los profesionales que empiezan a trabajar en acero”.

Agrega que el ICHA tiene mucho que decir y hacer para representar lo mejor de nuestro diseño y para ello tiene que estar presente en los programas de formación, debe aportar con publicaciones, canalizar aportes económicos de la industria a la investigación, etc.

“He trabajado con acero toda la vida y pienso que hoy tenemos un gran desafío que es introducir este material en la edificación de viviendas, pues tiene la gran ventaja de la velocidad de construcción, lo que reduce considerablemente los costos y los impactos ambientales de la obra”, señala el ingeniero.

Recalca que la industria del acero debe invertir en estudios, ensayos, investigación y especialmente calibración, con el fin adoptar nuevas y buenas decisiones normativas. Agrega que “me quiero quedar en la palabra clave: calibración. Calibrar una norma es saber si lo que se está incorporando como nueva disposición normativa conduce a un diseño razonable o no. Para eso hay que probar los casos frecuentes, los menos usuales y los casos raros. No tenemos la capacidad de prever sólo desde la investigación académica si una disposición nueva conduce a un diseño económico y seguro o hay casos en que la proposición se dispara o resulta excesivamente cara”.

Explica que “tenemos que hacer el ejercicio de diseñar estructuras representativas y ver el resultado” y en ello deben colaborar expertos calificados, la industria y la academia.

Hasta el 18 de diciembre se realizará la consulta pública para el proyecto de la norma NCh3744 Construcción Industrializada – Términos y definiciones, desarrollada por un grupo de destacados profesionales del área pertenecientes al Consejo de Construcción Industrializada, en el marco del Convenio de Cooperación y Transferencia de Recursos entre el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) y el Instituto de la Construcción (IC).

 

Francis Pfenniger, presidente del Comité Anteproyecto de Norma de Industrialización y director del IC, señala que, entre los grandes desafíos estaba el coordinar a un grupo muy grande de personas representantes de todos y los más diversos actores de la construcción.

 

“La gran participación demuestra el interés y necesidad de contar con este instrumento. Gracias a esto se pudo levantar un universo de más de 90 conceptos que luego se redujo a los términos que actualmente están en la norma en consulta. Los debates fueron intensos, informados y muy productivos, y el resultado refleja este esfuerzo”.

 

Erwin Navarrete, jefe de la División Técnica de Estudio y Fomento Habitacional (Ditec) del Minvu, señala que la mejor manera de posicionar este tema es contar con un documento de conocimiento y uso público, aprobado en consenso por el sector y un organismo reconocido.

 

“El Instituto de la Construcción fue un aliado estratégico para el Minvu en este anteproyecto de norma. Su trabajo y aporte fue clave para cumplir con el objetivo. Agradecemos el esfuerzo y compromiso a Francis Pfenniger y Sebastian Lüders, por asumir la presidencia y vicepresidencia respectivamente, y también a Ítalo Sepúlveda, José Luis Mena, Oscar Zacarelli y Yasmila Herrera por su participación y compromiso en el trabajo del comité que realizó el documento”.

 

Por su parte, Yasmila Herrera, encargada Centro de Costos de la Ditec, y participante del comité, señala que llegar a una definición final consensuada por todos, implicó mucha discusión y entender todos los puntos de vista.

 

“El trabajo fue enriquecedor, permitió conocer las necesidades, opiniones y experiencias de todos los rubros, en un ambiente de mucho trabajo y respeto, por lo que fue una gran experiencia”.

 

Beneficios de la norma

 

Contar con una normativa de construcción industrializada permitirá sentar las bases de la industrialización en Chile y desarrollar un trabajo y una comunicación coordinados óptimamente con los actores del sector, de manera de potenciar el desarrollo de iniciativas que detonen el impulso que se requiere para elevar el estándar constructivo a través de este concepto.

 

Erwin Navarrete, señala que “la construcción industrializada nos permite llegar a una mejora en la calidad de los procesos y productos. Reduce los tiempos en los que se ejecutan las obras, permite un mejor control de calidad y reduce los desechos de construcción, lo que da el gran potencial de entregar viviendas de calidad y sostenibles en menor tiempo y para más familias”.

 

En este sentido, los principales beneficiados con esta normativa son quienes reciben el producto final, es decir, una vivienda, una ampliación, una avenida o una plaza, entre otros elementos.

 

“Si todos los actores del sector entendemos y aplicamos de la mejor manera las bases de la normativa en Chile, esto se traducirá siempre en una mejora en su calidad. Los actores que utilizaremos esta norma estamos en todos los ámbitos, el público, el privado, la academia, el diseño, empresas constructoras y productoras, entre otros”, añade Yasmila Herrera.

 

Por su parte, Fancis Pfenniger agrega que esta norma implica un primer paso para tener un lenguaje común y una terminología y conceptos claramente establecidos y consensuados que facilite y haga más fluida la comunicación entre los distintos actores. “Esto permitirá, por la vía de la precisión en el lenguaje, evitar discrepancias y facilitar el correcto entendimiento entre distintos documentos normativos y reglamentarios”.

 

Consulta Pública

 

Cabe señalar que los procesos de consulta pública son abiertos, por lo tanto cualquier persona del sector que tenga relación con el tema y esté interesada, puede participar de esta etapa.

 

“La participación en esta consulta pública es una tremenda oportunidad para validar, mejorar y sancionar un documento que es de gran relevancia para todo el sector. Mientras más personas se pronuncien, mejor”, comenta Francis Pfenniger.

 

Cabe recordar que el plazo para participar vence el próximo 18 de diciembre. Para acceder al documento se debe ingresar a www.consultapublica.cl, luego a la norma de interés y hacer click en el botón “participar” donde se deberán ingresar los datos para el registro.

 

El congreso organizado por Alacero sobre “el Futuro de la Industria en un Mundo Sustentable” finalizó con un claro mensaje hacia todos los integrantes de la cadena de valor de la industria metalmecánica para que los debates realizados durante las jornadas del encuentro se concreten en hechos y acciones, con objetivos y metas comunes.

Durante la apertura, el Director Ejecutivo de Alacero, Alejandro Wagner, se refirió a los desafíos y posibles soluciones para el sector de acero en América Latina: “estamos viviendo tiempos de cambios quizás sin precedentes, que definen la nueva agenda de nuestro sector y nuestras prioridades. Nos estamos transformando para acompañar estos desafíos”.

“Este congreso será un éxito si de acá nos llevamos ideas, si abrimos debates, si abrimos los ojos de otros, para generar una hoja de ruta común, respuestas y soluciones concretas, que incluso sirvan como input a nuestros gobiernos para transmitir la dimensión de este desafío y las políticas públicas necesarias para alcanzarlo”, agregó.

Por su parte, Máximo Vedoya, CEO de Ternium y orador a cargo del primer panel, destacó la importancia de estimular un diálogo abierto entre la industria y los gobiernos de la región para solucionar el problema de las emisiones de carbono. Además, se refirió a la necesidad de brindar oportunidades para atraer a la nueva generación de talentos de ingenieros e ingenieras. “Solo así lograremos el éxito”, concluyó. Además, anunció la presentación del Paper elaborado por Alacero con su Posicionamiento frente al desafío del Cambio Climático, la hoja de ruta del sector para contribuir con la baja de emisiones, así como también la necesidad de contar con políticas públicas que incentiven y aceleren esta transición.

Sobre este tema, Jeffrey Sachs -Autoridad Mundial en Economía y Desarrollo Sostenible de la Universidad de Columbia señaló que “Tenemos muchas incertidumbres, sobre todo en los países más ricos, ellos causan todas las crisis y no pagan por eso. No quieren compartir y pagar los impuestos. Los daños son cada vez más fuertes, necesitamos solucionar ese problema correctamente”.

En el mismo sentido, Aditya Mittal, CEO de ArcelorMittal, alertó “necesitamos salvar el planeta y también el acero, que es un producto muy importante” y aportó nuevas ideas para para ir hacia un sector cada vez más limpio: Smart carbon (UCCS), emisión cero con descarbonización y la exploración de otros procesos. Además, destacó especialmente la importancia de la diversidad en la organización y la inclusión de mujeres en cargos de gestión. “Es necesario que la empresa trabaje con diversidad, no solo como una meta a ser alcanzada, sino como algo natural”, finalizó.

Durante la segunda jornada se destacó la participación de Gustavo Werneck, CEO de Gerdau y próximo Presidente de Alacero en el período 2022 – 2023, quien estuvo a cargo del cierre del encuentro.” Estamos en un momento de cambios de mercados globales y de nuevas oportunidades para la industria del acero en Latinoamérica. Las proyecciones son que el PIB avanzará un 6% en los países de la región el próximo año. Además, hubo un crecimiento de la industria de 16% este año comparado con el anterior”, afirmó.

“Fortalecer el mercado de América Latina es fundamental y para eso tenemos que trabajar de manera colaborativa y en red. En los próximos años, van a llegar nuevas demandas a nuestra región y tendremos que estar preparados para ofrecer los productos y los más innovadores”, sostuvo. Además, detalló que la descarbonización es uno de los grandes desafíos del sector de acero y, en ese sentido, afirmó que la industria cuenta con “la ventaja de tener el acero más limpio y sostenible en comparación con el de nuestro principal competidor. América Latina emite 1,6 tn de CO2 a la atmósfera, frente a las 2,1 tn de China.”

Finalmente, aseguró que” la industria del acero tiene una función absolutamente relevante en la generación de empleo de alta calidad en América Latina” y reafirmó el compromiso de Alacero para “seguir de cerca todas las oportunidades que se presentan para la industria en la región”.

Por otro lado, el panel sobre el Panorama Político, Social y Económico de Latinoamérica comenzó con las palabras de Susan Segal, CEO Council of the Americas, quien aseguró que “la pandemia resultó en un tremendo avance en la tecnología y no vamos a retroceder”.

El evento se realizó en forma semipresencial y contó con la participación de más de 5.000 personas del sector de la industria metalmecánica, profesionales, periodistas, jóvenes, estudiantes y miembros de la comunidad de la industria del acero que pudieron debatir sobre los próximos desafíos del sector, conocer las últimas tendencias a nivel global y el panorama de los países de la región de América Latina.