El Instituto Chileno del Acero, en su condición de media partner con la revista digital Negocio y Construcción, permite a sus socios participar con temas de interés para el rubro con precios especiales.

Las empresas socias tiene la oportunidad de promover sus empresas, marcas, proyectos, desarrollos e innovación en este importante medio de alta visibilidad en la industria de la construcción, en revista digital, radio, catálogo, webinars y redes sociales.

Los interesados pueden contactar directamente a administracion@negocioyconstruccion.cl, o llamando al teléfono +56984296860 para ver otras opciones de promoción.

En su octava versión de “Encuentros de Acero”, el ICHA convocó a dos destacadas profesionales para tratar el tema “La urgencia de aplicar la economía circular en la construcción y cómo ayuda el acero en este proceso”.

Las conclusiones fueron alarmantes y para graficarlas sólo algunas cifras: la industria de la construcción genera al año más de 3 millones de m3 de Residuos de Construcción y Demolición –  RCD, y el 20% de ellos no cuenta con sitios autorizados para su  disposición. Además, cada hectárea de vertedero significa la pérdida de 15.000 toneladas de agua subterránea y 525 kg de suelo fértil cada año, señaló Paola Molina, presidente del directorio del Comité de Edificación Sustentable – CES y el Subcomité de Economía Circular del Instituto de la Construcción.

Lo peor de esto, dijo la profesional “Se estima que, en Chile, se generan pérdidas del orden de US$315 millones anuales por mermas en materiales. Estos residuos son altamente aprovechables, pero terminan en residuos o escombros”.

Considerando que los efectos del cambio climático ya los estamos sufriendo con una mega sequía que dura más de una década, las acciones para revertir sus efectos “son urgentes”, señaló Molina. Para ello, dijo, hay que trabajar en algunos objetivos, tales como que el 50% de la edificación e infraestructura pública nueva cuente con criterios y atributos de diseño y construcción que se enmarquen en el modelo de economía circular, y al menos el 40% de los materiales, productos, piezas y componentes utilizados en ellos. Además, los edificios deben medir y reducir su huella de carbono y contar con certificaciones ambientales.

“Hay que diseñar Edificios Reversibles, que puedan ser desmontados al término de su vida útil y no demolidos como es la práctica habitual de hoy”. Según Paola Molina, la construcción en acero es una gran ayuda y aporte para este objetivo.

Actualmente Paola Molina preside también el Comité de Economía Circular del Instituto de la Construcción, instancia donde participan 28 instituciones de los sectores público, privado y academia, cuyo objetivo es instalar y promover sistemas constructivos amigables con el medio ambiente.

Por su parte, Paula Araneda, jefe de la División Tecnología de la Construcción del IDIEM, expuso sobre el tema “Economía Circular: Innovación en la Construcción y el rol del acero”.

Señaló que la industria de la construcción en Chile explica el 26% del uso global de energía y genera el 33% por ciento de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero del país. Además, genera casi 6 millones de toneladas de residuos al año. “por cada 10 pisos que se construyen en un edificio, uno equivale a residuos, por lo que la pérdida económica para las constructoras y la economía es enorme y evitable”.

Dijo que este problema se soluciona con el ecodiseño de los edificios y generando soluciones constructivas que incluyan la reducción, reutilización y reciclaje de los materiales. Destacó el uso del acero, ya que sus propiedades le permiten ser reciclado indefinidamente sin perder propiedades, por lo que se debe promover y practicar activamente su utilización y el reciclaje de los despuntes.

 

Entre enero y junio de este año, el consumo aparente de acero en Chile sumó un total de 1 millón 660 mil toneladas, equivalente a un incremento del 27% con respecto a igual período del año pasado, indicó Juan Carlos Gutiérrez, Director Ejecutivo del ICHA, lo que equivale “al mayor volumen del quinquenio 2017-2021”.

El ejecutivo explicó que el consumo aparente de acero es el resultado de la suma de la producción nacional más las importaciones y restando las exportaciones. Además, en esta oportunidad se consideró el consumo real de acero, que incluye la variación del inventario existente en el país.

Resultados por familias de productos

En relación con el consumo aparente de productos largos, que incluyen barras y perfiles, la cifra llegó a 753 mil toneladas, reflejando un crecimiento de un 12,4% respecto del 2020.

“El consumo aparente de barras en el primer semestre 2021 es el más alto de los últimos 5 años, alcanzando un volumen de 685 mil toneladas y una variación positiva de un 12,2% respecto del primer semestre del año anterior”, señaló el ejecutivo y destacó que este es uno de los principales insumos para la industria de la construcción.

En cuanto a los perfiles, utilizados principalmente en la industria metalmecánica, durante el primer semestre de 2021 obtuvieron una variación positiva de un 14,9% respecto del primer semestre del año anterior, alcanzando un volumen de 68 mil toneladas.

Otra gran familia de productos corresponde a los aceros planos, que incluye planchas laminadas en caliente y en frío, además de galvanizadas y aceros especiales. En este ítem, el consumo aparente en el primer semestre de 2021 alcanzó las 892 mil toneladas, presentando un crecimiento de un 42,3% respecto del primer semestre del año 2020 y el mayor del último quinquenio.

En estos productos destacó el incremento que tuvieron las planchas gruesas cuyo consumo aparente creció en un 88,6% respecto de igual período del año anterior, alcanzando a 356 mil toneladas, incrementando en 167 mil toneladas el consumo del período anterior.

Proyección para 2021

Juan Carlos Gutiérrez señaló que para este año se espera que el consumo aparente de acero se sitúe en el rango de las 3 millones de toneladas, lo que significaría un aumento de casi el 28% en relación con 2020 y lo ubicaría en el nivel que registraba el país en 2012.

“Estos resultados demuestran que la industria del acero en Chile respondió adecuadamente a la crisis y ha podido recuperarse en forma adecuada, e incluso superando las expectativas, asegurando la existencia de acero para la construcción, minería y la industria metalmecánica”, señaló Gutiérrez.

Informe de Acero

El ICHA publica trimestralmente para sus socios un informe completo respecto del consumo aparente de acero en Chile y es el único reporte en el país que detalla el comportamiento de las distintas familias de productos de acero y utilizando para su confección fuentes oficiales como son el servicio de Aduanas, el banco Central, la Asociación Mundial del Acero y la Asociación Latinoamericana del Acero.