Con un formato virtual, debido a la contingencia, se realizó el cuarto “Seminario Internacional de Construcción Industrializada: Industrialización en tiempos de reactivación”, organizado por el programa Construye2025 de Corfo y el Consejo de Construcción Industrializada (CCI), más el apoyo de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT).
El encuentro fue inaugurado por el vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Carlos Zeppelin, quien se refirió a los desafíos sanitarios, económicos, sociales y ambientales que enfrenta la industria y el rol que juega la industrialización frente a ellos. “La construcción industrializada es una muy buena herramienta, que reduce impactos en obra y minimiza los residuos de la construcción. La invitación es a que las acciones se implementen ya, buscando la eficiencia y los mejores estándares, a confiar y construir confianza, trabajando en equipo”, afirmó.
En ese contexto, el gerente de Construye2025, Marcos Brito, llamó a ampliar la mirada sobre la industrialización, la que va mucho más allá de prefabricar. “Es un concepto mucho más amplio, que involucra ordenamiento y una manera de producir mucho más eficiente”, señaló.
Por su parte, la presidenta del CCI, Francisca Cruz, hizo hincapié en lo complejo que ha sido el año para un rubro “tremendamente expuesto a la mano de obra in situ, que ha tenido dificultades muy grandes para poder mantener la continuidad operacional”. Por eso, es que la industrialización -según dijo- no es solo una tendencia, sino una necesidad. “Cuando el ambiente es más controlado, hay más certidumbre y seguridad”, acotó.
Pero la industrialización también responde a la necesidad de reducir los residuos, un punto al que las empresas están poniendo cada vez más atención. Asimismo, la presidenta del CCI, valoró el rol de la innovación y la digitalización en la oferta y la estrategia de negocios.
La mirada internacional
Una de las invitadas al seminario fue la socia de McKinsey & Company en Madrid, Maria Joao Ribeirinho, quien reafirmó el enfoque industrial que está tomando el rubro en un escenario en que los requisitos de sostenibilidad son cada vez más amplios. En este ámbito, las tendencias de futuro son, al menos, tres, en su opinión: la industrialización, la digitalización y la entrada de nuevos actores. “En diferentes lugares del mundo hablamos de modularización: unidades individuales, a veces paneles; unidades volumétricas; o estructuras completas. Podemos tener diferentes constructos para lo que es modular y aunque el término módulo es cada vez más popular, no hay una sola solución para todos los proyectos. Pero, lo más importante es que estamos viendo una mentalidad más modular en la industria: paneles 2D, 3D o estructuras modulares completas”, afirmó.
Según la especialista de McKinsey & Company, lo importante es pensar con una “mentalidad modular”, para poder dividir el producto en componentes. “Una construcción modular puede ayudarnos a disminuir tiempos y tiene menor variabilidad en los resultados, que son competitivos y sustentables, porque el proceso genera menos contaminación y menos materiales sobrantes”, indicó.
En este sentido, el camino apuntaría a aumentar la escala y sofisticar la fabricación de módulos, hacer modelamiento 3D, gestionar la colaboración digital aumentada y mejorar la programación de los proyectos y la ejecución offsite. “Las herramientas digitales nos pueden ayudar con la eficiencia en la gestión de la mano de obra”, argumentó Maria Joao Ribeirinho.
Respecto a la irrupción de nuevos actores, la invitada internacional comentó que, en el espacio modular, ya existen muchas empresas que hacen la estandarización en la producción de módulos y otras que se mueven en el e-commerce. “Esto genera mucha más competencia y transparencia de los precios”, afirmó.
Finalmente, compartieron sus puntos de vista Scott Fisher, CEO de PrefabNZ en Nueva Zelandia; y Johann Betz, fundador de Offsite Design. Este último, puso énfasis en el desafío de construir viviendas asequibles y de buena calidad; mientras que el primero aseguró que el Lean Manufacturing debiera ser la piedra angular de la industria, ya que la construcción offsite está por sobre esta base. “La producción limpia sin desperdicios debiera ser un requerimiento fundamental”, señaló Fisher.
Iniciativa tiene por objetivo impulsar medidas que disminuyan la demanda de recursos, logren menor impacto ambiental, regeneración del medio ambiente y protección del patrimonio ambiental.
Este martes 03 de noviembre, se presentó la visión y se inició el proceso colaborativo para la co-creación de la Estrategia de Economía Circular en Construcción, iniciativa en la que participan como actores activos el Instituto de la Construcción (IC), la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y el programa Construye2025 de Corfo, junto con la facilitación técnica de la Corporación de Desarrollo Tecnológico (CDT).
La Estrategia busca generar un plan de acción público-privado al 2025, como continuidad de la Hoja de Ruta RCD Economía Circular al 2035 y en el marco de la Hoja de Ruta nacional de Economía Circular al 2040.
En el evento virtual, la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt, celebró que la construcción sea la primera industria en generar una estrategia sectorial en el marco de la Hoja de Ruta Nacional.
“El sector de la construcción no es solo el principal consumidor de materias primas a nivel global, sino que genera más del 35% de los residuos que actualmente se producen en nuestro país. Prevenir y reducir los residuos de la construcción y la demolición, sin duda producen impactos medioambientales significativos, pero también enormes beneficios y oportunidades directas para las empresas del sector”.
A ello añadió que “con la incorporación de la economía circular en el mundo de la construcción se abren innumerables posibilidades para la optimización y el ahorro de recursos, así como también para la innovación y el emprendimiento”.
Por su parte, el presidente del Instituto de la Construcción, Miguel Pérez, señaló que “realizar un Estrategia Sectorial de Economía Circular en Construcción es, sin duda, un tremendo desafío que nos convoca a todos quienes formamos parte de la cadena de valor de la industria. El Instituto de la Construcción es una entidad que está constituida por los principales actores públicos y privados del país, por ello nuestro desafío es y será integrar a todos para que contribuyan con una amplia diversidad de ideas, opiniones y enfoques, que nos permitan finalmente pasar de una economía lineal a una economía circular”.
Carlos Zeppelin, vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción, planteó que el desarrollo de esta estrategia es un desafío relevante para el sector. “Que hoy estemos reunidos es una oportunidad para relevar lo importante que es que avancemos rápido y con fuerza, por una cultura de construcción circular. Es fundamental cambiar el paradigma de cómo construimos para enfrentar los desafíos actuales y futuros”.
Asimismo, Alejandra Tapia, coordinadora técnica de sustentabilidad del Programa Construye 2025 de Corfo, indicó que “hago un llamado a distintos liderazgos, cualquier persona desde el rol que desempeña, puede ser un gran líder para empujar, implementar acciones que nos ayuden a avanzar hacia una construcción circular y más sostenible”.
Estrategia
La Estrategia de Economía Circular en la Construcción, pretende establecer en Chile la cultura de construcción circular, viéndola como un desafío y al mismo tiempo como una oportunidad que permita el desarrollo sostenible, social, ambiental y económico de la industria, a través de iniciativas coordinadas entre el sector público, privado, academia y la validación ciudadana.
Este proyecto es de carácter nacional y busca impulsar medidas que disminuyan la demanda de recursos, lograr menor impacto ambiental, la regeneración del medio ambiente y protección del patrimonio ambiental, junto con la mejora de la calidad de vida de las personas. Sumado a esto, también instala la oportunidad de innovación y nuevos modelos de negocio circulares, para generar una reactivación económica verde posterior al escenario de pandemia al que nos hemos enfrentado este 2020.
“Estamos frente a una oportunidad para impulsar un cambio en la industria que favorezca el mejoramiento de los procesos de producción, hacia una mayor innovación, industrialización y digitalización. Los invito a sumarse a este desafío de trabajar de manera participativa y colaborativa, para que juntos promovamos el desarrollo sostenible del país y por consiguiente logremos una mejor calidad de vida para las personas y las futuras generaciones”, concluyó Miguel Pérez, presidente del Instituto de la Construcción.
En la tercera y última jornada del ciclo de charlas técnicas “Desafíos y Soluciones del Acero en la Construcción. Impacto en el Diseño y la Productividad “, organizado por el ICHA y la Universidad Autónoma de Chile, tres destacados expertos del sector construcción describieron las bondades de este material aplicado en obras públicas.
Sergio Sierra. Gerente Comercial de EDYCE se refirió a los desafíos y logros en el proyecto Américo Vespucio Oriente. Señaló que el mayor desafío ha sido levantar el mayor viaducto del país en un espacio muy reducido y con plazos acotados. Explicó que para solucionar esto se recurrió al acero y al sistema industrializado de construcción.
Continuó el ingeniero argentino Martin Polimeni, socio principal de EEPP Ingeniería quien se refirió al tema “el uso del acero en puentes y viaductos”. Su principal conclusión fue que el uso del acero en puentes y viaductos permite que estas obras sean rehabilitadas cuando terminan su vida útil sin tener que recurrir a demolerlas y construir obras nuevas que resulta mucho más caro.
Finalmente, Claudio Sarmiento Jefe de la Unidad de Investigación, Desarrollo y Asistencia a Clientes de CAP expuso sobre el caso del “Puente Chacao. Desafíos, Mitos y Realidades”.
Señaló que en respuesta al desafío presentado por el consorcio constructor del proyecto Puente Chacao, debieron fabricar una nueva barra de refuerzo para hormigón bajo la norma ASTM A706 grado 80, con un diámetro superior al tradicional, permitiendo mayor resistencia y al mismo tiempo mayor ductibilidad.
Indicó que es necesario continuar con el desarrollo de productos para proyectos, como el caso que significó el puente del Canal de Chacao, que exigen aceros con mayores pretaciones que las utilizadas habitualmente en Chile, y posteriormente pueden ser consideradas para otras construcciones en el país.